domingo, 28 de agosto de 2011

Amor que nunca fue

Alguna vez creí como todos, en el amor. Desperté en una cama desnuda escuchando ruidos de pájaros y un calor abrumador que me ponía de buen humor, lo vi parado mirándome dulcemente y aguardando silencio contemplándome. Me contó que hace tiempo no sentía amor, que hace tiempo no se enamoraba y no se sentía tan feliz. Me reí por lo bajo pensando en su hermosa mirada y en sus labios hasta que cobre valor para decirle que nos encontrabamos en la misma situación. ¿Es feo sentir que es tarde? ¿Qué iba a pasar después de salir de ese cuarto en el cual el amor, es lo único que tiene valor? ¿Y si tan sólo es un sueño? ¿Y cómo decirle que no me importa nada en la vida más que él?, tenía tantas preguntas dando vueltas en mi cabeza y siento que lo tengo tan lejos hoy pero tan sólo está en frente mío mirándome con amor. ¿No será una trampa? No lo sé, tampoco me importa o quizás sí... Pero ese bombón sonreía como si fuera que nada más en el mundo importara y que se podía caer todo abajo por un instante pero él seguiría mirándome firmemente.
Luego de un rato, me envolví en una sábana de color carmesí que olía a la noche anterior y su perfume importado inpegnada en ella, se metió debajo de las sábanas y acaricio mi cuerpo en unos segundos que saboree con dulzura y me besó de tal forma que jamás antes me habían besado, con ese amor y esa locura de una noche que no se acabará. ¿Realmente estoy enamorada? No puedo dejar de ver lo que tengo frente a mis ojos, su mirada me cautivó desde la primera vez que lo pude ver y sus manos se deslizaron por todo mi cuerpo marcando en mí su nombre y, siento que jamás podré dejar de amar a aquel muchacho. Todo se acabo al rato, salí de su casa agachando la cabeza sin poder mirar a su madre, abracé a su hermano menor que de hecho adoro, y me preguntó si me acompañaba hasta mi casa y respondí sin pensar un simple: 'no'. Me miró extrañado y tomé rumbo a mi casa. Yo sabía que su sangre estaba en mis venas y que ya no podía ser de otro hombre jamás y solamente de él sería mi corazón, y cómo decirle que lo amo de esta forma tan loca.
¿Estoy besando a la muerte o estoy respirando el último suspiro? No puedo describir este amor de mejor forma; no hay mejor amor que el que nunca fue. Por eso mismo sueño y vivo en este amor, sin pretender que esto ocurra. Respiro mi último suspiro.


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