Hay personas que dicen que cambian pero siguen siendo la misma que conociste y te lastimó. Muchas veces se repiten las historias pero a veces los protagonistas son reemplazados y el que sale del telón, se pone mal. Hay cosas que duelen y hay otras que dan penan, personas que por dentro son gusanos e intentan ser alguien haciendo sentir mal a los demás y lo logran. Queda en uno darle importancia a esa persona o no, es elección de uno permitirse a uno mismo perder su protagonismo para convertirse en un juguete del otro participante. Hay veces que tampoco entendemos el por qué estamos mal y nos damos cuenta que el Karma tan sólo somos nosotros mismo, nosotros actuamos y nosotros queremos y sufrimos, nosotros jugamos con otras personas y sus sentimientos y aquellas harán lo mismo con nosotros o otras personas. Hay cosas que no cambian, no dejan de doler igual, no cambian su figura.
Hay gente que se destaca en tanta cosas, lindas como malas. Pero somos personas y a veces queremos a quién no debemos a veces, a veces luchamos por cosas que ya perdimos y no aceptamos el error, a veces amamos con todo el corazón y todo sale bien. Lo único que puedo decirle a Usted, es que me equivoqué mucho con muchas cosas pero nunca quise lastimar y tampoco sufrir. Creo que nadie busca ninguna de las dos, pero las cosas a veces no son como uno espera. Tengo la certeza que voy a estar mejor.
Acá estoy, sentada en mi cama muy relajada y en cierta forma, en paz. Es viernes y me voy a quedar estudiando francés para prepararme para mi prueba final, tendría que ir a lo de una amiga a dormir pero no puedo. Le dieron el alta a mi mamá y está acá, quizás las cosas para mí no vayan muy bien pero estoy tranquila, la semana que viene tengo pruebas.
Y, somos personas.
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