Piso sus pies sobre la tierra, después de un largo tiempo que ella busco la respuesta de un “¿por qué?” a todo lo que le pasaba comprendió que hay cosas que no se deben entender y tomar decisiones sin pensar a veces. La vida la golpeo, la vida fue una perra con ella pero supo llevarla aunque le trajo sus consecuencias ella siguió en pie. Se conformo con nada, empezó de cero pero al final lo logro y ella sabe bien, que eso se siente demasiado hermoso. Esas nubes de algodón blancas casi no eran visibles, a miles de metros del sueño y con el corazón en la boca ella estaba feliz ahora no le importaba cómo o por qué, sólo sabía que se sentía bien y no sentía culpa, miedo o tristeza.
No estaba feliz del todo, pero sabía que ella nunca había merecido aquel dolor causado por personas que actúan con imprudencia pero lo que sabía con razón que luego vería a esas personas sufrir y gozaría de ese dolor pero ella no lo causaría. En el cielo, en alto en sus nubes en sus sueños era una paloma, volaba si límites y rumbo, volaba lo más alto y no pararía hasta lograrlo. En su mente, era un buda, se quedaba sentada y pensaba las cosas dos veces. En su corazón, era un tigre de corazón negro y azul, negro como la oscuridad y azul como el mar. En su vida tomo un ciclo nuevo, no comprendía las cosas que pasaban por su mente pero sabia bien que ya todo había acabado y que podía lo que más quería, era todo lo que quería ya nada más importaba.
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