lunes, 6 de diciembre de 2010

No quiero ser la chica que se ríe más fuerte o la chica que nunca quiere estar sola, no quiero ser la que te llama a las cuatro de la mañana por ser la única que conoces en todo el mundo que no está en casa. el sol está que ciega me volví a desvelar, estoy encontrando que no es así como quiero que acabe mi historia. Estoy a salvo, muy alto. Nada me puede tocar pero, ¿por qué siento que la fiesta se acabó? Sin dolor. Por dentro, eres mi protección
Pero, ¿cómo me puedo sentir así de bien, sobria?
No quiero ser la chica que tiene que llenar el silencio, el silencio me asusta porque grita la verdad. Por favor no me digas que tuvimos esa conversación, si no me acuerdo no gastes saliva porque, ¿ya para qué sirve? la noche me llama y me susurra suavemente “ven a jugar” y estoy cayendo
Y si me dejo convencer sólo a mí me culparé. Cuando es bueno, es bueno, es muy bueno hasta que hace daño. Hasta que estás buscando a quien una vez fuiste, me he oído llorar
¡Ya nunca más! Destrozada en agonía tratando de buscar un amigo.

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